Francia: multa a Essilor Internacional con 81 millones por supuestas prácticas comerciales discriminatorias

Essilorluxottica ha informado -a través de un comunicado. que apelará la decisión de la ACF), con el fin de demostrar que la acusación es infundada.

La FCA ha explicado que tras operaciones de “inspección e incautación, audiencias e intercambios con los principales actores del sector de las lentes ópticas”, ha procedido a “sancionar a Essilor International SA por un importe de 81.067.400 euros, por haber realizado, durante 11 años y 7 meses, prácticas comerciales discriminatorias destinadas a obstaculizar el desarrollo en Francia de la venta en línea de lentes correctoras”.

Al respecto, Essilorluxottica ha remarcado que cree firmemente en la legalidad de sus prácticas y en la relevancia de distribuir segmentos específicos de productos recetados “en condiciones que nos permitan garantizar que los consumidores puedan obtener la mejor corrección de la visión que requieren sus necesidades visuales individuales”.

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El grupo también ha afirmado que sus prácticas cumplieron plenamente con los contextos competitivos y regulatorios del periodo en cuestión, y que beneficiaron no solo a sus clientes y socios, sino también a toda la industria.

¿QUÉ DICE LA ACF?

La ACF sostiene que, ante el auge de la venta online, Essilor, desde el 29 de abril de 2009 hasta el 23 de diciembre de 2020, implementó prácticas discriminatorias destinadas a obstaculizar el desarrollo de este canal de distribución.

Entonces, “la Autorité descubrió por primera vez que Essilor ocupaba una posición dominante en el mercado francés de distribución mayorista de lentes correctoras, dado el tamaño y la estabilidad de su cuota de mercado, la densidad y la fiabilidad de su red de distribución, su presencia en todos los niveles de la cadena de valor del sector, así como la ausencia de una demanda compensatoria”.

La Autorité señala que “estas restricciones respondían a las expectativas proteccionistas muy fuertes de los ópticos físicos con respecto al grupo Essilor

La ACF también considera que “Essilor había abusado de esta posición dominante al implementar una política comercial discriminatoria destinada a obstaculizar el desarrollo en Francia de los sitios de venta online, en primer lugar y sobre todo los que ofrecen una oferta mixta o todo online, como Sensee, Happyview o DirectOptic”.

Para evitar que los sitios de venta online ofrecieran lentes de marca Essilor o Varilux a los consumidores -siempre según la ACF-, la estrategia desarrollada por Essilor en 2009 consistió no solo en negarse a entregarles lentes de marca, sino también en prohibirles usar las marcas y logotipos de Essilor y comunicar sobre el origen de las lentes.

Durante la investigación, “Essilor no aportó ninguna prueba que permitiera concluir que estas restricciones estuvieran justificadas por las supuestas diferencias, en particular en cuanto a la fiabilidad de las mediciones realizadas, entre las ópticas que desarrollan su actividad en tiendas físicas y las que realizan su actividad online”.

La estrategia desarrollada por Essilor en 2009 consistió no solo en negarse a entregarles lentes de marca, sino también en prohibirles usar las marcas y logotipos de Essilor

Por otro lado, la Autorité señala que “estas restricciones respondían a las expectativas proteccionistas muy fuertes de los ópticos físicos con respecto al grupo Essilor. Este último podría, de hecho, a diferencia de los sitios online, estar autorizado a usar el logotipo de Essilor sujeto al cumplimiento de reglas claras y objetivas”.

 La Autorité también sostiene que Essilor, si bien se opone a la venta en línea de lentes correctivos en Francia, también comercializa este tipo de lentes en el extranjero”.

Estas prácticas, que tuvieron lugar en un sector de la salud pública caracterizado por precios elevados, presentan, según la Autorité, un cierto grado de gravedad.

Si bien los sitios de venta en línea ofrecen una gran competitividad en términos de precio y responden al deseo de las autoridades de fomentar un modo de comercialización que conduzca a precios más bajos, “las prácticas comerciales discriminatorias de Essilor pueden haber favorecido los precios de mantenimiento de las gafas en niveles altos y crecientes durante el período de infracción”.

También han contribuido a limitar las opciones y la información de los consumidores, aunque, como ha señalado la Autorité, el acceso a los productos de Essilor y la comunicación sobre este punto presentaban un problema crucial en términos de credibilidad para el canal de ventas en línea emergente, “dada la reputación inigualable de estos productos”.