El sector de la óptica en Portugal es importante para muchas empresas españolas con intereses en ese país. General Óptica, Cecop, Opticalia, Temática Software o Grupo Prats, o filiales en la Península Ibérica de multinacionales como Luneau Technology u Hoya han seguido con atención todo lo ocurrido en el mercado luso debido a la pandemia de la covid-19.
Así afectó la covid-19 a la óptica portuguesa
Lo cierto es que las ópticas portuguesas se enfrentaron a un escenario incierto entre marzo y abril de 2020, cuando se produjo el primer confinamiento, y entre enero y febrero de 2021, durante el segundo encierro, según una investigación del Centro de Estudios Aplicados (CEA) de la Universidad Católica de Portugal, realizado a petición de la Asociación Nacional de Ópticas (ANO).
El estudio señala que, entre marzo y abril del pasado año, solo el 8% de las empresas mantuvo sus operaciones sin cambios, pero un 9% de filiales fueron cerradas de manera definitivamente.
el sector redujo sus inversiones en un 16,7% en ese primer confinamiento
En un sector que, originalmente es estable en términos de empleo, hubo necesidad de reducir personal (5,8%) y cubrir la falta de recursos humanos con apoyo familiar (9,42%).
De manera paralela, el sector redujo sus inversiones en un 16,7% en ese primer confinamiento cuando, históricamente, las ópticas siempre han apostado por la renovación sistemática de sus equipos.
(Los ópticos portugueses levantan la voz contra las consultas optométricas gratuitas)
En abril de 2020, cundo se agudizó la pandemia de la covid-19, el 50,2% de las empresas registró unas caídas de ingresos de entre el 75% y el 100%, volviendo a valores similares solo en junio.
el 50,2% de las empresas registró unas caídas de ingresos de entre el 75% y el 100%
El 23,19% no contó con ningún apoyo del Estado (no cumplió con los requisitos o por falta de adecuación a las necesidades) y el 37,32% se vio formado a solicitar préstamos bancarios para aliviar su tesorería.
SEGUNDO CONFINAMIENTO
En el segundo confinamiento, sucedido entre enero y febrero de 2021, el 33,7% mantuvo inalterada su actividad, aunque las reducciones de las ventas oscilaron entre el 24% y 50%.
El 81,94% de las empresas enfrentó un aumento de gastos, comprometiendo el nivel de inversión; el 20,2% tuvo que reducir los márgenes y el 13.8% puso en marcha un proceso de reorganización o reestructuración para enfrentar la situación.
A través de este enlace puede acceder al estudio.
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