Pedro Rubio, presidente de la Asociación Española de Óptica, ve con optimismo el 2021, después de un año de pandemia en el que, según se estima, la caída de facturación del sector será de dos dígitos.
Pedro Rubio (AEO): “Hemos conseguido ser un sector altamente valorado por el consumidor”
Pregunta: Después de un año de pandemia, ¿cuál es el “estado de salud” de los fabricantes y distribuidores de gafas?
Respuesta: Los fabricantes y distribuidores de óptica, como sector sanitario que somos, que además cuidamos de la salud visual de los pacientes -una salud que ha estado y estará especialmente impactada por el uso intensivo de pantallas durante la pandemia-, afrontamos con responsabilidad y confianza el 2021, para seguir dando siempre un buen servicio público y cuidar el sentido más importante, como es la vista.
La categoría de producto que más ha sufrido los confinamientos en 2020 han sido la de gafas de sol, y aquí esperamos un importante rebote de ventas en primavera y verano de 2021, por la demanda contenida de reposición, pero además reforzada por el uso prioritario de terrazas para socializar, nueva costumbre que ha venido para quedarse, y una vez las vacunaciones avancen, también vuelva el turismo.
Hemos sufrido mucho como sector en 2020 pero dando un gran servicio de calidad y seguridad a la sociedad, y miramos con energía positiva el 2021, al haber sido reconocidos como un sitio de confianza para el consumidor, cuando visita los establecimientos de óptica.
P. Como patronal ¿en cuánto estima las pérdidas causadas por el confinamiento a las empresas del sector?
R. Estamos cerrando los datos correspondientes al año 2020 y todo indica que aunque hubo una cierta recuperación en el tercer trimestre y también, aunque más pequeña, en el cuarto. Las cifras de cierre de año comportarán descensos porcentuales de dos dígitos y una caída importante en el sector de gafas de sol. De todos modos, en unos meses veremos la Edición Expres del Libro Blanco de la Visión de Fedao y Visión y Vida, un informe que nos indicará cómo ha evolucionado el sector durante este último año y que nos dará unas cifras más exactas de la magnitud del problema.
“La categoría de producto que más ha sufrido los confinamientos en 2020 han sido la de gafas de sol”
P. Diversos estudios señalan que el confinamiento ahondó los daños en la salud visual de la población. ¿La gente ha ido a las ópticas para solucionar sus problemas de visión?
R. La realidad es que sí que ha habido visitas a las ópticas. Si nos comparamos con otros sectores, somos realmente afortunados. No solo porque hemos podido dar servicio a todos los que lo han necesitado todos estos meses, sino que la crisis nos ha afectado -y mucho- pero siempre hay otros con peor suerte. Por ello, sí que es verdad que ha habido visitas, pero debería haber muchas más.
De los dos últimos estudios de Visión y Vida, el de verano (“Cómo ha afectado el confinamiento a nuestra salud visual”), nos mostraba cómo el 70,1% manifestaba que se revisaría antes de finalizar el año -debido a la gran sintomatología de problema visual que había sentido durante el confinamiento-. Sin embargo, en el informe de octubre (“¿Estamos cuidando la visión en la ´nueva normalidad´?”) demostró que de ese porcentaje, solo el 18,2% había ido a una revisión. Así, descubríamos, de nuevo, otro 29% decía que se revisaría antes de finalizar el año.
P. Si la respuesta de la población no ha sido la esperada ¿a qué atribuye este factor?
R. La gente sigue yendo a revisarse, sobre todo aquellos que han sentido serios problemas o que han visto cómo su visión está mucho peor que hace meses, pero también hay otros muchos que, por diversos motivos, siguen procrastinando la revisión: motivos económicos, de prioridades, de “aguantar las molestias”, etc.
En todas las ediciones de los Libros Blancos de la Visión hemos manifestado, una y otra vez, que la visión siempre es la más olvidada. Que por ejemplo, de media, un 20% de la ciudadanía tiene la costumbre de revisarse anualmente y, sin embargo más de la mitad de la población va al dentista. Esto viene desde la infancia: de los menores de 7 años, solo tres de cada diez se han revisado, pero la mayoría van cada año al dentista.
“la visión no duele, creemos que podemos sobrevivir, aunque sea viendo mal”
Creo que es un problema intrínseco de la sociedad: la visión no duele, creemos que podemos sobrevivir -aunque sea viendo mal- y priorizamos otras cosas antes que cuidar nuestra visión.
Por eso tenemos que seguir trabajando para que el hecho de tener una revisión visual anual visual sea una de las citas que se apunten en la agenda de toda la ciudadanía, siempre de una manera preventiva y no reactiva, y que no borremos. Creo que es nuestra misión como sector.
P. Intermón Oxfam acaba de emitir un informe de casi 800.000 personas más en España podrían caer en la pobreza severa tras la pandemia. ¿Cómo puede afectar estar situación a las empresas de la AE0?
R. Pues mucho. Si recuerdas, cuando estábamos en plena crisis del 2008-2011, en Visión y Vida se hizo un estudio que demostró que comenzábamos a sentir la denominada “pobreza visual”. Es decir, de aquella supimos que más del 50% de las ópticas estaba notando un descenso de entre el 20 y el 30% de las revisiones visuales anuales a las que estaban acostumbrados. Del mismo modo, el 10% de las personas a las que se les prescribía un cambio de lentes (por más de 0,5dp) retrasaban la compra de nuevos equipamientos por motivos económicos. Por último, de aquellos que decidían comprar sus gafas o lentes de contacto, el 90% invertía un 10% menos.
Si seguimos esa tendencia, de nuevo veremos cómo volvemos a relegar el cuidado visual, pero esta vez, por miedo a suponer un gasto en las familias al que no se podrá hacer cargo.
“Es muy destacable que en un momento de crisis, hayamos crecido en número de socios”
Por todo ello desde las entidades del sector, y lideradas por Visión y Vida, estamos trabajando con las autoridades por lograr un bono social como en Italia para que aquellas familias que están quedando excluidas del sistema puedan hacer frente a la compra de nuevos equipamientos ópticos en los años venideros. ¡Esperamos tener suerte y que el Gobierno nos atienda, dado que no es solo nuestro sector, sino que la salud visual de la población está en riesgo!
P. Las crisis también suelen dejar enseñanzas. ¿Qué han aprendido las empresas afiliadas a la AEO de la pandemia generada por la crisis sanitaria?
R. La primera y más importante: que la unión hace la fuerza; y que gracias a la gran colaboración y trabajo en equipo de todos los asociados, y además con Fedao y Visión y Vida, hemos conseguido ser un sector altamente valorado por el consumidor, que se ha dado cuenta de los efectos de la pandemia en su visión y de la necesidad de visitar su óptica de confianza. Además, se nos reconoce como un sitio seguro de compra.
A su vez, y por primera vez en nuestra historia, hemos incorporado en las asambleas trimestrales de la AEO a ponentes del retail, para que nos ayudaran a entender mejor como estaba evolucionando el sell-out y también las evoluciones en los siguientes trimestres.
Por otro lado, hemos asesorado a los socios sobre cómo afrontar los Ertes o ERES, según fuera el caso, lo que ha ayudado a mitigar el impacto en los resultados de este año.
“el consumidor debe saber que el lugar seguro para comprar sus gafas de sol es la óptica”
Es muy destacable que en un momento de crisis donde todas las compañías deben evaluar hasta el último euro de inversión, hayamos crecido en número de socios durante la pandemia, lo que demuestra que las acciones llevadas a cabo desde la AEO son reconocidas de valor en el sector.
En conclusión, el mayor aprendizaje ha sido que aunque con sufrimiento y mucho trabajo y esfuerzo común, juntos saldremos reforzados de esta crisis.
P. De cara al verano, en el que, en teoría, la situación sanitaria habrá mejorado ¿la AEO impulsará otra campaña destinada a frenar el consumo de gafas falsificadas por parte de la población?
Sí, llevamos años trabajando en ello y hemos lanzado varias iniciativas tanto desde AEO como Aecocc y Aecop, que representan a cadenas y grupos de óptica. Ello se ha visto reforzado con campañas institucionales, así como con las que han realizado los diferentes colegios profesionales o la Asociación Visión y Vida contra el top manta con Asgeco, con la asociación Top Manta, con los medios de comunicación y en redes sociales.
“Es prácticamente imposible valorar el perjuicio de la falsificación de gafas”
Este año, cómo no, no será menos. En primer lugar, porque la sociedad lleva muchos meses en casa y el sol es cada vez más intenso, por lo que, sin protección, pueden sufrir problemas visuales. En segundo lugar, porque el sol es el segmento más dañado del sector. En tercer lugar, porque creemos que es un tema que debe ser erradicado y el consumidor debe saber que el lugar seguro para comprar sus gafas de sol es la óptica.
Tenemos que ver qué forma toma esta campaña, pero te puedo confirmar que sí, haremos algo al respecto. Primero, empezando por los propios profesionales ópticos-optometristas, a los que podemos ayudar a vender más y mejor sol y a defender ese segmento de negocio. Después, con el consumidor, que debe entender los riesgos de saltarse el canal oficial de compra.
P. ¿Han cuantificado cuál es el perjuicio económico que causa al sector la venta de gafas falsificadas?
Es prácticamente imposible valorar el perjuicio de la falsificación de gafas. Es un mercado ilegal y opaco, pero creemos que podría representar el 25% e incluso más. Podemos ver la magnitud acorde con algunos estudios presentados por Visión y Vida que nos indican que una de cada tres gafas de sol que se compran en España se venden a través del top manta. Asimismo, el Libro Blanco de la Visión 2018 dice que, del total de gafas de sol comercializadas en España, 10 millones se venden en tiendas de ropa, bazares y gasolineras y 6 millones en el “top manta”. Con esto creo que todos podemos ver que genera un gran perjuicio económico a nuestro sector, sin contar con el daño a la salud visual que se puede estar produciendo.
Suscríbete a la newsletter de modaengafas.com