De la hipoxia corneal a a la infección ocular: ojo con el uso inadecuado de lentes de fantasía

“Cada vez es más frecuente el uso de lentes cosméticas como complemento de los disfraces de Halloween, pero existen riesgos si se utilizan sin ser prescritas y adaptadas por un óptico-optometrista”, ha explicado la entidad.

Las lentes de contacto de fantasía —al igual que las correctoras— son productos sanitarios y, por tanto, deben adquirirse exclusivamente en establecimientos sanitarios de óptica, donde se garantiza su correcta adaptación y seguimiento profesional.

La presidenta del COOG, Esther Amaro, ha recordado que “las lentes de contacto cosméticas son productos sanitarios de adaptación individualizada y deben cumplir los mismos requisitos y parámetros que las lentes correctoras. Solo un óptico-optometrista puede evaluar si un paciente es apto para su uso y adaptar las lentes de manera correcta”.

El COOG advierte que el uso inadecuado o la falta de adaptación profesional pueden provocar hipoxia corneal —déficit de oxigenación en la córnea—, reacciones alérgicas oculares o incluso úlceras corneales, derivadas de una manipulación incorrecta o de la presencia de gérmenes. Estas úlceras incrementan el riesgo de infección ocular y pueden dejar secuelas permanentes en la visión.

“Sin la supervisión y las instrucciones proporcionadas por un óptico-optometrista, las personas que utilicen este tipo de lentes corren el riesgo de sufrir infecciones o daños significativos en la córnea”, ha subrayado Amaro.

La lentes de contacto cosméticas también están clasificadas como productos sanitarios según la legislación española, por lo que su manipulación debe estar a cargo de un profesional sanitario experto en salud visual.

Con esta campaña, el COOG busca concienciar sobre el papel esencial del óptico-optometrista en la adaptación y seguimiento de las lentes de contacto, incluso cuando se utilizan con fines estéticos o recreativos.