Adrián Salgado: “Que sea el consumidor el que elija cómo y qué servicio quiere recibir en la óptica”

Pregunta:  Usted ha trabajado en Visionlab, en Novovisión, pero en 2004 decidió poner en marcha su propia empresa. ¿Qué le motivó a convertirse en un emprendedor?

Respuesta: Tuve mucha suerte en mi último año de universidad, al poder realizar las prácticas en Clínica Novovisión en el Paseo de la Castellana de Madrid, y tener de tutor a César Villa, quien fue mi mentor. De hecho, cuando terminé la carrera, me ofrecieron trabajo.

Estamos hablando del año 2002, en pleno boom de la cirugía Lasik, algo que fue muy importante para el desarrollo de la oftalmología y la optometría en España. Solo trabajaba de lunes a viernes y, cuando llevaba un tiempo, vi una oferta laboral de Visionlab para los sábados. Nunca había trabajado en una óptica y me apetecía hacerlo… además, necesitaba el dinero.

Aunque estuve poco tiempo, en aquella época Visionlab era una empresa muy innovadora con estrategias comerciales muy bien estructuradas, y con mucha chispa en los anuncios de la TV como la campaña de “los tres en un burro”; era justo lo contrario a mi trabajo principal en la clínica; así, vi en ambas empresas aspectos clínicos y comerciales que se podían conjugar y, como soy muy inquieto, me parecía que para hacerlo tenía que crear mi propia empresa.

P. ¿Por qué decidió montar su primera óptica en Sarria, que es su lugar de origen, pero que tiene solo algo más de 10.000 habitantes?

R. Mi idea principal era la de abrir una óptica en Madrid, pero no tenía el dinero suficiente y uno de mis posibles socios se echó para atrás. Así que lo único viable era empezar en mi pueblo, con un proyecto más pequeño, viable y realizable. Por eso volví a Galicia, pero Madrid me encantaba.

P. ¿Cuáles fueron las dificultades que encontró en esos inicios?

R. Bueno, el objetivo era estructurar un proyecto equilibrado en todas las áreas (comercial, marketing y servicios clínicos) y lo más difícil siempre es darse a conocer. Cogí unos años muy buenos del 2004 al 2008 y me capitalicé rápido. Después surgieron las dificultades del crecimiento, el aprender a delegar y a enseñar a otros, lo que, sin duda, fue lo más complejo.

«Después surgieron las dificultades del crecimiento, el aprender a delegar y a enseñar a otros, lo que, sin duda, fue lo más complejo»

P. ¿Y cuáles fueron las motivaciones que le permitieron superar esos obstáculos?

R. La ilusión, eso puede con todo, y el hacer cosas nuevas.

 P. Luego de Sarria, abrió en Monforte, A Coruña y Lugo, donde, en la actualidad, tiene dos establecimientos. Sin embargo ¿qué ha significado la compra de Contalén, que es una de las empresas históricas del sector?

R. La adquisición de Contalén es un punto de inflexión para nuestro crecimiento, no solo para mí, sino para todo mi equipo, que está muy ilusionado con este nuevo proyecto, y en cómo vamos a integrar todo lo que Contalén ha construido en Vigo con nuestros servicios, estrategias, nuestra marca e imagen.

P. ¿Mantendrá el nombre de Contalén o implantará su marca en Vigo?

R. La marca Contalén tiene una historia de 45 años en Vigo, mantendremos la marca integrándola con nuestra imagen y logotipo.

P. ¿Cuáles son los planes para 2024? ¿La expansión seguirá centrada en Galicia o piensa dar el salto a otras comunidades?

R. Lo más eficiente y coherente es continuar creciendo en Galicia por cercanía, pero iremos allá donde aparezcan oportunidades.

P. ¿En qué nivel se encuentra el proceso de digitalización de Adrián Salgado Óptica y Audición?

R. El concepto de digitalización es muy amplio, y afecta a muchas áreas del día a día de la empresa. Tenemos un sistema de digitalización de facturas, albaranes y cualquier tipo de documento desde el año 2015, nuestras consultas están muy avanzadas desde el punto de vista tecnológico y de digitalización, hace un año realizamos un proyecto para automatizar algunos procesos y listados con Powerbi, pero siempre hay recorrido de mejora.

«Si no hay suficientes profesionales, el mercado, ayudado por la tecnología, tendrá que buscar soluciones»

P. El avance de la digitalización también está abriendo nuevos caminos en el sector o, mejor dicho, nuevas polémicas. ¿Qué opina de la refracción en remoto?

R. Sin duda, es mejor la presencia de un optometrista, creo que eso no tiene mucha discusión, pero la realidad es que existe una carencia muy grande de optometristas en España; adicionalmente a las ópticas, las clínicas y el sistema sanitario están demandando un número superior de profesionales de los que sale de las facultades de óptica, especialmente en algunas zonas de España. Si esto no se soluciona y no hay suficientes profesionales, el mercado, ayudado por la tecnología, tendrá que buscar soluciones. No soy partidario de poner puertas al campo, que sea el consumidor el que elija cómo y qué servicio quiere recibir.

P. ¿Cómo ve el sector de la óptica en los próximos diez años, tanto desde el punto de vista del negocio como de la profesión?

R. La verdad es que soy muy optimista, veo muy bien el sector, cada vez se abren más y nuevas líneas de productos y servicios, que lo ensanchan. Hay productos como las lentes de control de miopía que hasta hace pocos años no existían, servicios como la terapia visual que antes era algo de nicho y ya es más frecuente, o la moda en óptica, que tiene mucha más importancia que en décadas pasadas.