Giorgio Armani y Leonardo del Vecchio: dos amigos que ya no están

Ambos compartían una misma raíz: el corazón volcado en Milán. Cada uno, desde su orilla —la moda y el diseño Armani, la fuerza empresarial de Del Vecchio— alcanzó las cimas más altas. En 1988, sus caminos confluyeron en el universo de las gafas: el primero aportando su genio estético, el segundo su talento industrial. Desde entonces, su alianza no dejó de renovarse, la última vez en 2022, sellando un compromiso común con la belleza, la artesanía y la innovación.

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Essilorluxottica, heredera de esa unión, expresó su pesar por la partida del diseñador, al tiempo que subrayó el lazo de amistad que unía a Armani y Del Vecchio, un vínculo tejido en respeto y admiración, y que aún late en la memoria de la compañía.

“Un visionario que transformó la moda con una elegancia atemporal y un espíritu incansable de innovación”: así definió la multinacional al creador que convirtió las gafas en algo más que un instrumento óptico, elevándolas a la categoría de accesorio imprescindible. Con la misma clarividencia, Armani y Del Vecchio vislumbraron esa metamorfosis, dando origen a una de las asociaciones más influyentes de la industria.

Essilorluxottica señaló que seguirá honrando las “extraordinarias contribuciones” de Armani a la moda y las gafas, “y su legado continuará inspirando a las generaciones venideras”.