Blackfin acelera en sostenibilidad con Black Shelter Sustainable Factory

La construcción se integra en el entorno mediante el uso de cristal, acero y madera. Estos materiales permiten una relación directa con la luz natural y con las variaciones del paisaje a lo largo del año, según ha explicado la compañía que está liderada por Nicola del Din. La estructura busca representar la identidad corporativa de Blackfin, caracterizada por su vínculo con el territorio y su orientación hacia modelos productivos de nueva generación.

En el interior, los espacios están organizados para un proceso productivo continuo. Incluyen áreas destinadas al tratamiento del titanio, talleres para operaciones manuales y zonas de diseño y control de calidad. La distribución tiene como objetivo favorecer la coordinación entre procesos tecnológicos y actividades artesanales.

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El Black Shelter incorpora criterios de sostenibilidad. Funciona con energía renovable, dispone de sistemas de recuperación térmica y ha sido construido con materiales reciclables. Según la empresa, estas características lo convierten en un ejemplo de manufactura que atiende al impacto ambiental y a las condiciones de quienes trabajan en sus instalaciones.

La sede pretende ser también un espacio que refuerce la cultura productiva de la compañía. Cada decisión arquitectónica responde a la intención de crear un entorno coherente con los valores de calidad, trazabilidad y responsabilidad asociados al Made in Blackfin.

Para la firma, el Black Shelter funciona como evidencia de un modelo industrial que combina autonomía, sostenibilidad y un enfoque propio en la fabricación.