Moscot refuerza su expansión en Asia con su desembarco en China y una nueva óptica en Japón

El debut en China marca un hito clave para la compañía, ya que supone su entrada en una de las ciudades más dinámicas y cosmopolitas del país, además de abrirle las puertas a uno de los mercados más grandes del mundo.

En Japón, la nueva tienda de Tokio es la segunda de Moscot en la capital nipona. En total, la empresa suma cuatro puntos de venta en el país —con presencia también en Osaka y Yokohama— además de tres pop-up stores en Nagoya, Fukuoka y Kioto.

Moscot: una mirada centenaria al emprendimiento

Estas aperturas refuerzan el plan estratégico de crecimiento de Moscot en la región APAC, que incluye la reciente inauguración de su primer establecimiento en Melbourne, Australia.

Durante el último año, la marca también ha consolidado su presencia en Europa con nuevas ópticas en Cannes, Forte dei Marmi y París Rive Gauche, además de ampliar su red en Múnich, Viena y Barcelona, reforzando su posicionamiento en el segmento premium del mercado óptico internacional.

Fundada en 1899 por Hyman Moscot, la historia de la compañía comenzó en Orchard Street (Nueva York), cuando su fundador vendía gafas desde un carrito ambulante. En 1915 abrió la primera tienda minorista en Rivington Street, dando origen a una empresa familiar que hoy mantiene su esencia tras más de un siglo de trayectoria.

Actualmente, Harvey Moscot, representante de la cuarta generación, lidera la firma y prepara la transición hacia la quinta, con el objetivo de preservar el legado artesanal y el espíritu original de la marca mientras impulsa una estrategia global de expansión y modernización.