Las complicaciones generadas por las lentes de contacto blandas en los niños son tan bajas como sucede con los adultos, según un estudio que aparecerá en la edición de enero de 2021 de Ophthalmic&Physiological Optics.
Espaldarazo al uso de lentes de contacto blandas para niños
Los resultados del estudio ofrecen a los profesionales de la salud visual valiosa información del mundo real para asesorar mejor a los padres mientras consideran opciones comprobadas de manejo de la miopía para ayudar a retrasar la progresión de la miopía.
Robin Chalmers se desempeñó como investigador principal del estudio, en el que también participaron John McNally, investigador de Coopervision, y Lisa Keay, de la Escuela de Optometría y Ciencias de la Visión para UNSW Sídney.
El estudio midió la tasa de eventos adversos en niños a los que se les recetaron lentes de contacto blandas
El trabajo se inició para respaldar las presentaciones reglamentarias de Coopervision de lentes de contacto de 1 Day MiSight, que actualmente están disponibles en 26 países, y que llegará a más mercados en 2021, según ha explicado la propia Coopervision.
El estudio midió la tasa de eventos adversos en niños a los que se les recetaron lentes de contacto blandas antes de cumplir 13 años, para establecer la seguridad de uso en ese grupo de edad.
La revisión documentó detalles de eventos adversos de las historias clínicas y los datos de ensayos clínicos de casi 1.000 niños, equivalentes a 2.713 años de uso de lentillas en 4.611 visitas. “En comparación con los resultados de eventos adversos derivados exclusivamente de ensayos clínicos, es probable que estos datos sean más generalizables a las experiencias del mundo real, ya que las lentes de contacto blandas para el control de la miopía se prescriben de forma más extendida a pacientes jóvenes”.
El estudio encontró que la tasa de incidencia anualizada de eventos inflamatorios fue de menos del 1% por año de uso
El estudio encontró que la tasa de incidencia anualizada de eventos inflamatorios fue de menos del 1% por año de uso. La mayoría de los eventos fueron conjuntivitis o abrasiones por cuerpo extraño.
Los autores señalan que el estudio encontró una tasa más baja de queratitis microbiana (7,4/10.000 años de uso) con un intervalo de confianza más estricto que otros estudios pediátricos posteriores a la comercialización, lo que brinda tranquilidad a los profesionales de la salud visual y padres de niños con respecto a la seguridad de las lentes de contacto blandas para el control de la miopía. Esa tasa es comparable a las tasas establecidas de queratitis microbiana en adultos.
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