Hace años que sabemos que las gafas de sol son un elemento indispensable debido a la concienciación que existe sobre el daño -cada vez mayor- que causan los rayos ultravioleta a nuestra vista. Pero, ¿qué valor añadido podemos darles a nuestras gafas de sol? Una de las respuestas es: las lentes polarizadas.
Se trata de gafas de sol base a las que se les agrega una lámina que filtra los rayos de sol que caen en una determinada dirección. De esta manera, se eliminan los reflejos y se permite una mejor visibilidad. Por este motivo, este tipo de gafas son populares hace mucho tiempo entre navegantes y pescadores, pero en la actualidad son muchos más quienes se benefician de sus ventajas.
Las gafas polarizadas son altamente recomendables para conductores habituales, ya que reducen los reflejos de la carretera y de la capota del coche. Asimismo, también ayudan a combatir la fatiga ocular que puede aparecer durante la conducción, sobre todo en trayectos largos, ya que aportan una visión más nítida y con mayor contraste. Solo si las gafas no son de calidad puede llegar a aparecer una distorsión o una sensación de visión borrosa.
Aliadas de los deportes al aire libre, entre otros
Este tipo de gafas también aporta beneficios a las personas que realizan deportes al aire libre asiduamente como esquiadores, ciclistas, golfistas y corredores, ya que todas estas actividades requieren la eliminación del resplandor para una seguridad y un rendimiento óptimos; a personas con los ojos sensibles a la luz, como pueden ser aquellos que tienen el iris claro; o a aquellos que han sido recientemente operados de los ojos.
Por el contrario, por su naturaleza, las gafas polarizadas pueden reducir la visibilidad de las imágenes producidas por pantallas de cristal líquido o por pantallas con emisores de luz LED, como, por ejemplo, las pantallas que encontramos en cajeros automáticos, móviles o navegadores.
¿Cómo distinguir unas gafas polarizadas?
Las gafas polarizadas se distinguen de unas gafas de sol tradicionales porque en la cara interna de la varilla tienen una “P” o la palabra “Polarized” inscrita para indicar que son unas gafas certificadas. En caso de no tenerlo, Alicia Escuer, directora técnica de Óptica Universitaria, explica que podemos colocar las gafas de sol frente a un monitor y moverlas lateralmente y verticalmente en distintos ángulos. “Si son polarizadas, al colocarlas en ciertos ángulos la lente debería volverse negra e impedir que podamos ver la pantalla a través de ellas, ya que, al sobreponer dos lentes polarizadas perpendicularmente, no pasa la luz”.
Además, las lentes polarizadas pueden combinarse con otras características que pueden mejorar la experiencia del usuario, por ejemplo, cristales polarizados progresivos para présbitas que practican deporte al aire libre o con lentes de espejo para aquellos que necesitan una lente más oscura por condiciones de máxima intensidad de luz (alta montaña, deportes náuticos…).