Flamingo da una vuelta de tuerca a su negocio con la incorporación de gafas graduadas. La compañía, que nació en el canal online hace cuatro años vendiendo gafas de sol, ha lanzado el concepto de “óptica responsable con un valor diferencial de precio cerrado sin sorpresas”.
Flamingo ‘exprime’ el marketing para impulsar un concepto de óptica con precios cerrados
De este modo, Flamingo está lanzando a los consumidores el mensaje de que es una óptica tradicional sin intermediarios, que conecta directamente al fabricante con el público. “Para la mayoría de los casos trabajamos con un precio cerrado y para el resto, que o bien tiene una graduación especial o bien quiere un tratamiento extra, contamos con el servicio a medida”, ha precisado la empresa.
Flamingo aplica el concepto de óptica responsable en el que fue su primer establecimiento físico, que está situado en el número 10 de la calle Almirante de Madrid, que abrió sus puertas el pasado abril.
Flamingo aplica el concepto de óptica responsable en su tienda de la calle Almirante de Madrid
La empresa, que tiene a internet como principal canal de venta, también cuenta con otro punto de venta en la capital española, concretamente en el número 56 de la calle Claudio Coello donde, de momento, sol,o vende gafas de sol.
Flamingo empezó sus operaciones en 2015, por iniciativa del empresario Alberto Velarde y otros tres socios. En diciembre de 2018, la compañía abrió su capital y dio entrada a dos nuevos inversores con el objetivo de obtener dinero fresco para impulsar el desarrollo a través de tiendas.
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